then open in external browser
and click "Open in External Browser" 
35 Fotógrafos de la naturaleza siendo «emboscados» de forma adorable por los animales que intentaban retratar
¿Hay algún fotógrafo que lo tenga más difícil que los fotógrafos de vida salvaje?
Viajan a lugares remotos, desde el gélido Ártico hasta selvas sofocantes, se escondne durante horas y esperan pacientemente el momento perfecto para captar a un animal en su elemento. ¿Y quizás lo más difícil? Se supone que no deben interactuar con sus sujetos.
Pero a veces, esa regla se deja de lado por culpa de los propios animales. Criaturas curiosas y atrevidas a menudo deciden observar a los extraños humanos con cámaras, intentando averiguar qué está pasando o incluso intentando convertirse en fotógrafos.
Claro que es mucho menos divertido cuando se trata de un león en lugar de un ciervo, pero bueno, aun así vale la pena.
This post may include affiliate links.
¿Qué botón es?
Nuka, de 5 semanas de edad. Un cachorro de lobo salvaje abandonado, encontrado a principios de mayo en el Bosque Bávaro.
No interferir con la naturaleza es fundamental en la fotografía de vida salvaje.
Pero imagina ver un mono peludo y amigable a un paso. ¿Cómo resistir la tentación de acercarse?
Pues hay que hacerlo. Es parte del trabajo. Y quienes rompen esta regla suelen pagar las consecuencias.
Analizando las fotos
El padre de mi amigo me dijo que fuera a caminar con él por el desierto.
Un búho gris aterriza en la cámara de un fotógrafo
La fotografía de la naturaleza está sobre una línea muy fina que hay que mantener si se quiere dedicar a ella en serio.
Por supuesto, más allá de las leyes que protegen a las especies en peligro de extinción y las directrices éticas vigentes, los fotógrafos tienen libertad creativa para dar vida a sus visiones.
Suricatas siendo amigables con un fotógrafo
El mono robó la cámara para hacerse un selfie
“Las organizaciones pueden tener sus propias directrices [como las de la BBC, por ejemplo], pero hay mucha variación en lo que se considera aceptable”, declaró a National Geographic el cineasta y fotógrafo profesional de vida silvestre Jeff Hogan.
“Eso también aplica a los fotógrafos: la ética varía mucho. Además, depende en gran medida de lo que se intente lograr con el trabajo”.
Si estás filmando un documental, se aplican ciertos estándares que podrían no ser tan estrictos cuando creas una pieza "basada en una historia real" o simplemente capturas un momento hermoso para colgar en tu pared.
Los leones marinos son realmente los perros del océano. Mientras los fotografiaba en las Galápagos, nadaban a mi alrededor y jugaban con mi equipo.
Y, por supuesto, está la realidad del equipo costoso, el clima impredecible, los largos ratos a solas con tus pensamientos y los animales que no siempre son tan amigables como parecen.
Sin embargo, cuando finalmente llega ese momento y logras la toma por la que has estado trabajando, vale la pena todo el esfuerzo. Compartir estos vistazos del mundo tal como es sin nosotros es un regalo para todos los que tienen la oportunidad de verlo.
De la nada, apareció una ardilla gris descarada, mirándonos fijamente como si dijera: "¿Tienes algo de comer?"
Este pequeño ladrón intentó robarme el bolso de la cámara, pero decidió morder parte de la correa.
Es un trabajo duro, pero gratificante. Así que, brindemos por los fotógrafos de vida salvaje y por todo lo que están dispuestos a soportar para que podamos presenciar la belleza de los animales en su elemento.
Antílope cabrío con una de mis cámaras remotas
Cuando el selfie no sale como se planeó
Este pez se coló en una foto mientras intentaba retratar a un tiburón.
Aquella vez que intenté fotografiar a un arrendajo azul y luego él intentó tomarme una foto
Los juguetones cachorros de agua de Baja
Este pulpo del Pacífico no es fan de las fotos
