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La base de investigación Chengdu en China parece poder ser uno de los lugares más adorables de la Tierra, además de un sitio de vital importancia para la supervivencia de los pandas gigantes que tanto nos gustan, una especie severamente amenazada. Esta «guardería» para pandas es en realidad un centro de crianza especializado y enfermería que busca criar nuevos pandas para revitalizar la menguante población en libertad de estos animales, que apenas cuenta con 1.864 individuos.

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Cada osezno panda es especial, no solo por lo encantadores que son, sino porque es muy difícil conseguir que los pandas se reproduzcan. Las hembras solo pueden concebir 2 o 3 días al año, y solo dan a luz un osezno cada dos años.

Más información en: panda.org.cn

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