Tus amigas te cuentan rumores de una compañera que no te quiere que habla mal de ti. Claro que te enfurece o te hiere esta información. Entonces te preguntas… debería hablar con ella? ¿Debo defenderme de ese ataque ante mis amigas? ¿Debería no creer en esa información y sentirme molesta con mis amigas que me acercan ese chisme? ¿Qué hacer?
Ante todo lo mejor es no responder impulsivamente. Por lo pronto estás frente a tus amigas y si no quieres que ellas verifiquen con tus acciones la información maliciosa que traen sobre ti, no debes responder en el acto con violencia. Lo mas aconsejable es no entrar en el engranaje del enojo, es decir, no brindar un mensaje, un feedback que pueda traer una nueva respuesta. No entrar en el dialogo mediatizado por tus pares con esta potencial enemiga puede ser tu mejor opción.
No olvides que a todos nos gusta el espectáculo y si de alguna manera podemos provocarlo y sentarnos a mirar, lo haremos. Esto no significa que tus amigas sean malas contigo, solamente que pueden verse tentadas como cualquier otra persona a observar un escándalo sin ser partícipes. entonces, ¿Qué debes hacer? La mejor forma de salir airosa y no dar lugar al tema es dar una respuesta positiva, sin maldad ni doble intención, por más esfuerzo que esto demande, e intentar minimizar los comentarios. puedes decir algo como «sé que ella se molestó por algo que hice, pero eso pasó hace mucho tiempo, éramos muy jóvenes; al día de hoy somos personas nuevas completamente» y cambias de tema. Para esto debes mantener serenidad y no tentarte a dar una respuesta ingeniosa. Evitar el tema, respondiendo sin responder, tendrá el efecto de aburrimiento. y en este tipo de ocasiones te sirve más.
Como se dijo anteriormente , todos queremos divertirnos y si llevarte información de ese estilo no causa el efecto deseado es probable que la siguiente vez que alguien quiera darte un mensaje así, evite hacerlo, sencillamente porque tú has sentado precedente al no dar lugar. Entonces un mensaje que podía desatar una escalada de odio ida y vuelta, a través de mas gente que ademas de ser testigo directo apuntala dicha pelea, finalmente desarticula esa trama potencial y la vuelve nula. Además, al demostrar que «tu no te enganchas» tendrás el doble beneficio de que empeore la imagen que la gente tiene de esa compañera que habla mal de ti. Es decir, al responder con tranquilidad, y no mostrarte afectada por los comentarios, quien finalmente queda mal parada es quien intentó iniciar dicha pelea, la emisora principal del mensaje malicioso. Entonces no solamente te evitas el disgusto de pelear con alguien sino que además logras «ganar» esa batalla sin siquiera participar. Y la gente no tendrá de ti la imagen de una mujer enojada y fuera de sus cabales, mas bien tendrán de ti la imagen de alguien alegre, que no busca pleitos. Toda la oscuridad y lo demoníaco quedará reservado para ella, será alguien que al haberse expresado así, habrá construido su propia imagen negativa. Finalmente, has salido airosa y ella ha hecho el trabajo sucio por ti!
¡El momento en que debes contener la ira que te provoca el mensaje!
Recuerda que el beneficio será mayor si mantienes la calma
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