Ahora que acaba de comenzar el verano debemos cuidar más aún a nuestra principal aliada: la piscina. Es tiempo de usarla full time y estos días resultan claves para su cuidado. Buscando información sobre el tema, encontré una excelente nota en el blog de Sergio Villella Bienes Inmuebles, inmobiliaria en Córdoba, sobre cómo mantener una pileta de natación.
Control del pH
El Ph es una propiedad del agua que indica su grado de acidez o alcalinidad. Lo que nos interesa de este dato es que su valor determina la efectividad de los productos que le coloquemos. Por ejemplo, si es un pH más elevado o más bajo de lo normal, no sólo que el cloro no tendrá los efectos buscados, sino que el agua puede volverse corrosiva o tomar otro color por el impacto químico. Las medidas óptimas deben estar dentro de un rango de 7,2 a 7,6.
Cloro y otros productos químicos
Para que el agua se mantenga limpia y en buen estado, es importante ser constantes con la colocación de los productos. En primer lugar, no sólo se trata de considerar el volumen de agua, sino también a su uso. Es decir, no es lo mismo que sea usada una vez por semana que todos los días, que van acumulando películas de grasa de los bronceadores, por ejemplo. Algunas personas, además de colocar cloro líquido o granulado, tienen la boya con la pastilla de manera permanente. Eso si, hay que ser cuidadosos y no excederse ya que el cloro en cantidad inapropiadas es perjudicial para la salud.
Otros productos que también deben ser nuestros aliados son el alguicida y el clarificador. El primero se usa cada siete días y la medida aproximadamente es ½ litro cada 50.000 litros de agua. Como su nombre lo indica, tiene acción en contra de algas y bacterias, que si no se evitan no sólo le dan mal aspecto al agua sino que además pueden obstruir caños y bombas. Luego tenemos el clarificador, que permite reagrupar aquellas partículas que quedaron sueltas y no las podemos sacar. Para su colocación, previamente debe ser diluido en un balde con agua y su dosificación es de ½ litro cada 100.000 litros de agua. Es mejor colocarlo la noche anterior a pasar el barrefondo. Una vez colocado, nadie puede hacer uso de la piscina.
Días de viento
Cuando la piscina no es muy grande, y especialmente para quienes tienen pileta de lona, durante las noches y en los días de viento, muchas personas las cubren con una lona o algún plástico. De esta manera, evitan el ingreso de bichos y de hojas.
Saca hojas
Realizar la tarea de sacar hojas es fundamental. Es complementaria del barrefondo pero opera sobre la superficie.
Renovar el agua
Cada un cierto tiempo, es bueno renovar el agua: sacar un poco mientras la limpiamos y luego poner la manguera para que se llene con agua limpia.
Más información: www.sergiovillella.com
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