¿Recordáis a Taz, de los Looney Tunes? Él y todos los diablos de Tasmania están considerados como especie amenazada. Por suerte, gente como Tim Faulkner dedican sus vidas a luchar contra su extinción. Tim es cuidador de diablos de Tasmania en Australia, y los animales a los que cuida le adoran. Sobre todo los pequeños.
Una de las crías está tan unida a Tim que lo persigue por doquier. En agradecimiento, Tim le da mimos y le rasca la barriga. Además de ser grandes nadadores y trepar a los árboles, los diablos de Tasmania también forman fuertes vínculos, y este pequeño es la prueba perfecta. Tim adora su trabajo y a menudo comparte conmovedores vídeos y fotos de su vida diaria entre los diablos.
Este pequeño marsupial es uno de los 150 ejemplares sanos de diablo de Tasmania que corretean por las instalaciones campestres de Devil Ark’s, en Nuevo Gales del Sur. Este santuario comenzó a funcionar en 2011 con tan solo 44 diablos. Desde entonces han pasado con éxito 5 periodos de apareamiento, en las que han nacido más de 180 crías sanas.
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