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Ha pasado un año desde que falleció la dueña de este gato, pero desde entonces el pobre no ha abandonado la tumba de la anciana. Keli Keningau, de Java, Indonesia, pasaba por allí y escuchó los tristes maullidos del gatito, así que intentó adoptarlo. Pero no funcionó: al día siguiente, el gato volvió de nuevo a la tumba de su dueña. Solo abandona su puesto para ir a la casa de los hijos de la fallecida, quienes lo alimentan. Los viandantes que lo ven también le dan agua y comida, pero el gato solo quiere revolcarse en la tierra y dormir sobre la tumba cada noche.

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«Duerme ahí y maúlla,» dijo Keli a The Mirror. «Es muy triste de ver. Demuestra lo que quieren los animales a sus dueños.»

Los expertos en animales afirman que aunque los gatos pueden parecer independientes e indiferentes a veces, su luto tras la muerte de sus dueños es algo muy real. Los felinos pueden sufrir ansiedad, perder interés en el resto del mundo y no parecer ellos mismos. En algunos casos, se anima a llevarlos al veterinario y ver si se les puede dar antiansiolíticos.

(via: mirror)

Un viandante escuchó los tristes maullidos de un gato sentado en la tumba de su dueña

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Resulta que lleva un año allí, porque no puede superar su pérdida

Intentaron adoptarlo, pero se escapó para volver junto a la tumba

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«Es muy triste de ver. Demuestra lo que quieren los animales a sus dueños»

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