Hace tiempo, la fotografía se consideraba un verdadero arte. La gente podía fotografiar solo unas pocas veces en toda su vida, y cada una de ellas era una auténtica celebración: junto con una boda, el nacimiento de un hijo o, por ejemplo, la graduación en la escuela. Estas fotografías bien podrían considerarse auténticas obras de arte.
Pero ahora, cuando casi todos tenemos la oportunidad de hacer una foto, el número de imágenes crece exponencialmente. Según los autores del sitio web Photutorial, cada segundo se toman casi 54.500 fotografías en todo el mundo, y no es de extrañar que entre ellas haya obras maestras incomparables, así como algunas extrañas, desagradables o incluso deleznables.
Es precisamente a esta categoría de fotografías a la que se dedica desde hace más de un año la página de Twitter llamada "Cursed Images" (Imágenes malditas), que recopila las fotos más extrañas, espeluznantes y divertidas jamás tomadas. A día de hoy, la página tiene aproximadamente 6.500 seguidores y decenas de miles de likes.
Hemos recopilado para ti una selección de las imágenes más populares que se han publicado en esta página, así que no dudes en desplazarte hasta el final, reírte, hacer muecas y, si tienes algunas fotos extrañas tomadas por ti mismo, nos gustaría verlas también en los comentarios.
Más información: Twitter
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Algunas de las fotos que ves fueron tomadas hace mucho tiempo, por lo que ahora tienen un aspecto bastante extraño. En algunas, el fotógrafo consiguió una combinación de primer plano y fondo bastante excepcional. Y bueno, algunas de las fotos pueden llamarse realmente "malditas", porque es difícil entender lo que ocurre en ellas.
"Algunas de estas fotos parecen claramente escenificadas", dice Ivan Strakhov, un fotógrafo ucraniano al que Bored Panda se dirigió para comentar el contenido de la página Cursed Images. "Hay un género especial en el cine llamado falso documental. Como su nombre indica, se trata de pseudodocumentales con temas ficticios. Ejemplos de este tipo de películas son el terrorífico Proyecto de la Bruja de Blair o la película pseudohistórica Zelig, de Woody Allen".
"Y justo en este género de falso documental, se tomaron algunas de estas fotografías. En alguna parte se puede ver que la gente se levantó o se sentó deliberadamente en la posición adecuada para que pareciera gracioso o extraño, en alguna parte hay rastros obvios de post-procesamiento. Pero la mitad de las fotos parecen haber sido tomadas por accidente, y ese es su valor", opina Ivan.
"De hecho, cuando la gente ahora camina constantemente con teléfonos inteligentes, y muchos no los sueltan en absoluto, solo unos segundos son suficientes para ver algo divertido o inusual y tomar una foto", comenta Ivan Strakhov. "Y a veces resulta muy interesante en general: una persona fotografía algo ordinario, por ejemplo, su amigo, su coche o su mascota, y luego, tras abrir la foto, ve que hay algo extraño en el fondo".
