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Cientos de villas similares a palacetes que fueron construidas para los ricos inversores del Golfo acaban de recibir a sus nuevos inquilinos: los fantasmas. El proyecto Burj Al Babas en la provincia de Bolu, al norte de Turquía, comenzó en 2014, pero sus creadores, el grupo Sarot, no ha conseguido la cantidad necesaria de dinero para terminarlo.

Image credits: Adem Altan/AFP/Getty Images

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El grupo Sarot entró recientemente en bancarrota a causa de la deuda de 27$ millones que adquirieron construyendo Burj Al Babas. Este proyecto estaba diseñado para incluir 732 villas de estilo chateau, piscinas, baños turcos, centros de salud y de belleza, un centro comercial y una mezquita, según su web. Y aunque clientes de Qatar, Bahrein, Kuwait, Emiratos Árabes y Arabia Saudí compraron unas 350 villas de las 587 que se consiguieron construir, no fue suficiente.

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Image credits: AFP

«No pudimos conseguir unos 7,5$ millones pendientes de pago por las villas que vendimos a los países del Golfo. Pedimos protección contra la bancarrota, pero el juez declaró la bancarrota directamente. Vamos a apelar,» escribió el periódico Hurriyet sobre las palabras del consejero del grupo Sarot, Mehmet Emin Yerdelen.»

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El juez también ordeno detener la construcción inmediatamente, pero Yerdelen tiene esperanzas. «El proyecto está valorado en 200$ millones. Solo necesitamos vender 100 villas para pagar nuestra deuda. Creo que podemos superar esta crisis en 4 o 5 meses e inaugurar parcialmente el proyecto en 2019.»

Más información en: burjalbabas.com

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La gente tuvo algo que decir sobre este proyecto y su destino

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